16/9/12

Peña Ubiña, 17/08/2012.


Desde los Picos de Europa Juanlu, José Antonio y yo nos trasladamos más al este de la provincia de León, concretamente a Torrebarrio, en la comarca de Babia, para ascender a una de las montañas de más solera de la zona: Peña Ubiña.
Torrebarrio de Arriba (a la derecha) y de Abajo (izquierda)
El recorrido consta de unso 12 km entre ida y vuelta y tendremos un desnivel positivo acumulado de unos 1300 m. Tardé en completarlo más de 7 horas.
Primeros pasos
En Torrebarrio Bajo buscaremos una plazoleta con un gran abrevadero. Cerca de un grifo que hay en un pequeño jardín hay información sobre un PR. Hay que tomar una calle que luego se convertirá en camino carretero de tierra, camino que sube hasta la ermita y, posteriormente, a la base de la peña, por ese sendero de pequeño recorrido cuyas marcas nos acompañarán en todo momento.

Ascenderemos gradualmente casi hasta la base del espolón este de la peña, donde las marcas nos obligan a dejar la pista hacia la derecha. En breve hay que tener mucho cuidado porque existe una bifurcación, marcadas ambas opciones con hitos de piedra. Una de ellas sigue de frente y, más o menos, en llano, y otra va ganando altura mientras vamos hacia la base de la peña a la izquierda, opción que cogeremos y es por donde van las marcas del PR (nosotros tomamos la otra y tuvimos varias dudas antes de arribar al Collado del Rozón).
Espolón este de Peña Ubiña
Vamos por la ladera y en paralelo al espolón, que tendremos a nuestra izquierda. De frente observaremos Peña Ubiña Pequeña, que es la peña que resalta a nuestra derecha según el sentido de nuestra marcha. Encaminaremos nuestros pasos al collado que se divisa a la izquierda de esa peña, que no es otro que el Collado del Rozón y, ya en él, ascenderemos ahora hacia la izquierda hasta la cima de Peña Ubiña, como digo siempre acompañados por las marcas del PR, que nos conducirán por el recorrido más cómodo y menos peligroso, ya que a veces existen tramos aéreos y hay que trepar un poco.
Collado del Rozón y Peña Ubiña Pequeña
Andaremos con paciencia, y es que la cresta parece que no tiene fin. Nos llevará un buen rato vislumbrar la verdadera cima. Ya en la cumbre sólo tendremos que desandar lo andado.
Desde la cumbre

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